Como respuesta a las últimas restricciones impuestas por la Unión Europea (UE) contra ocho canales de información rusos, Moscú ha aplicado contramedidas al acceso desde el territorio ruso a los recursos web de 15 medios de comunicación de los Estados miembros del bloque involucrados en la difusión de información falsa, anunció este lunes el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia.
De acuerdo con la Cancillería rusa, tanto Bruselas como las capitales de los Estados miembros de la UE han recibido reiteradas advertencias de que las prohibiciones y restricciones injustificadas contra los medios de comunicación rusos, así como otras formas de represión “con motivos políticos”, no quedarán sin respuesta por parte de Rusia.
“La responsabilidad de estos acontecimientos recae exclusivamente en la Unión Europea y los Estados miembros del bloque que apoyaron las decisiones ilegales y que optaron conscientemente por desencadenar la espiral de sanciones, violando así todas sus obligaciones internacionales en materia de garantía del pluralismo mediático y la libertad de acceso a la información”, reza el mensaje oficial.
La decisión representa una respuesta al 16.º paquete de sanciones antirrusas aprobado por el bloque en febrero que incluyó la suspensión de las licencias de emisión de la UE a ocho medios de comunicación rusos y la prohibición de la difusión de su contenido, argumentando que han contribuido a “desestabilizar” tanto a los países vecinos de Rusia como a la UE y sus Estados miembros.
En este contexto, desde el Ministerio de Exteriores ruso detallaron que si se levantan las restricciones impuestas contra medios de comunicación rusos, Moscú también reconsiderará su decisión respecto a los medios europeos.
Desde febrero de 2022, países occidentales han prohibido el acceso a varios medios de comunicación rusos, así como han bloqueado el acceso a ellos en varias plataformas y redes sociales. Además, en algunos países se ha restringido la emisión de canales de televisión rusa y se han bloqueado los canales de YouTube de numerosos medios de comunicación rusos.
Desde Rusia, en repetidas ocasiones, han señalado que solamente se trata de la censura impuesta por parte de los países occidentales en sus intentos de encubrir la verdad. Así, la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, afirmó en diciembre del año pasado que Moscú “no dejará sin respuesta” los ataques contra sus medios y se reserva el derecho a responder simétricamente al bloqueo de sus canales.
“Privar a sus propios ciudadanos de la oportunidad de formarse independientemente una opinión sobre los acontecimientos que tienen lugar en el mundo, sustituyendo la imagen objetiva del mundo por una simulación de la realidad fabricada por los grandes medios de comunicación y las redes sociales controladas por los círculos gobernantes, viola flagrantemente los derechos humanos fundamentales a la libertad de expresión y desmantela los cimientos de una sociedad democrática“, indicó.